Nota: Esta reseña se enfoca en evaluar el rol de Bruce Wayne/Batman en la película, razón por la cual, el lector la puede percibir como incompleta.
Título original: Batman v Superman: Dawn of Justice
Título para España: Batman vs Superman: El amanecer de la justicia
Título para América Latina: Batman vs Superman: El origen de la justicia
Año de estreno: 2016
Productora: Warner Bros. Pictures
Duración: 151 minutos (Versión de cines) y 182 minutos (Ultimate Edition)
Dirección: Zack Snyder
Reparto: Ben Affleck (Bruce Wayne/Batman), Henry Cavill (Clark Kent/Superman), Jesse Eisenberg (Lex Luthor Jr.), Amy Adams (Lois Lane), Jeremy Irons (Alfred Pennyworth), Gal Gadot (Diane Prince/Wonder Woman), Diane Lane (Martha Kent)
“Dime, ¿También sangras? ¡Sangrarás!”
Batman a Superman
Definición
El esperado enfrentamiento de Batman y Superman en la gran pantalla es una película demasiado ambiciosa, sobrecargada y repleta del drama insulso de Zack Snyder.
Prólogo
La película arranca con flashbacks de los orígenes, ampliamente conocidos, de Batman: los padres son asesinados al salir de un teatro, el joven huérfano sale huyendo del funeral, cae en un pozo, tiene un encuentro con algunos murciélagos, se planta la semilla de lo que un día será el justiciero de Gotham. Desde estos primeros minutos son evidentes los planos con uso de cámara lenta que caracterizan a Snyder y se menciona a Martha, nombre que será el leitmotiv de la historia.
El mundo conoce a Superman
En esta parte de la película se nos muestra la visión de Bruce Wayne de la batalla final entre Superman y el General Zod (Michael Shannon). Estos minutos están colmados de emocionalidad efectista para darle sustento a las acciones que posteriormente tomará este personaje. Esta sección de la cinta sirve para recordarnos que se trata de una secuela directa de Man of Steel (2013).
18 meses después
Aquí arranca en verdad la película y somos testigos como empieza a andar un plan que busca que Batman y Superman se enfrenten hasta la aniquilación. Un Jesse Eisenberg sobreactuado le da vida al villano Lex Luthor quien plantea el foco de la película: los límites del poder, en este caso de un ser casi divino como el kriptoniano.
Batman, que a pesar de estar en el título de la cinta es más bien un personaje invitado, es presentado como un vigilante que lleva veinte años ejerciendo en Gotham, sin embargo, de manera contradictoria parece ser un desconocido en su propia ciudad y en la vecina Metropolis. Por su parte, Bruce Wayne es un millonario demasiado convencido de sus habilidades y que rumia entre dientes sus conspiraciones.
En el último tramo de la película es ridículo el motivo por el cual Batman y Superman dejan de pelear (el leitmotiv del que les hablé antes), aunque, se requiere que unan fuerzas para hacerle frente a una amenaza que constituye el plan B de Luthor. Es en esa batalla final en que quizás, a pesar de ciertos fallos narrativos, están los mejores momentos, ver el traje de Batman en todo su esplendor y ser testigos de la introducción gloriosa (música incluida) de Wonder Woman.
Conclusión
Aunque me quedo con el bonito mensaje sobre el sacrificio del héroe y el sentido de ser humano, la película está llena de fallos que ni siquiera su versión definitiva (Ultimate Edition), que agrega 30 minutos al metraje, es capaz de mejorar y, al contrario, la hace interminable.
