Desde la semana pasada cuando el
Banco de la República puso en circulación el billete de cien mil pesos he
encontrado en redes sociales, particularmente en Facebook, textos e imágenes
que critican la selección de Carlos Lleras Restrepo como personaje homenajeado
en el mismo.
Como reza el dicho popular “para
gustos los colores” por eso en mi caso particular considero que Lleras Restrepo
tiene todos los pergaminos para estar en ese billete.
Para mi gusto, Carlos Lleras Restrepo
es uno de los presidentes más destacables que hemos tenido en todos los años de
vida republicana. En su gobierno hizo un aporte importantísimo al
fortalecimiento de la economía colombiana y creó o vigorizó instituciones
descentralizadas que modernizaron la estructura del Estado.
Por supuesto que hay puntos
oscuros en su administración, por ejemplo, apostó por una reforma agraria
ambiciosa, que nos habría evitado muchos dolores de cabeza, pero luego, por
esos vericuetos que tiene el poder, él mismo frenó. Fue sancionado por el
procurador de la época por intervención en política (algo que todos nuestros
gobernantes de la diestra a la siniestra hacen) y terminó en una relación
bastante tirante con su alma máter, la Universidad Nacional de Colombia, donde
estudió Derecho, Ciencias Políticas y Sociales. Finalmente, hizo parte de ese “duopolio”
de repartija de poder que cándidamente llamamos “Frente Nacional”.
Para concluir, como ciudadanos,
podemos estar de acuerdo o no con las decisiones que tome el emisor sobre que
personajes incluye en monedas y billetes. Con lo que no estoy de acuerdo es
que, probablemente por desconocimiento, graduemos de inútiles y corruptos a
todos nuestros gobernantes desde don Andrés Díaz Venero de Leyva hasta Juan
Manuel Santos, sin hacer distinciones.